Ecuador expresó este miércoles 10 de abril su voluntad para “reconstruir las relaciones de confianza con México“, no obstante, lamentó que la Organización de Estados Americanos (OEA) no rechazara la actuación del Gobierno de Andrés Manuel López Obrador que otorgó el asilo político al exvicepresidente de la República, Jorge Glas.
México “también cometió una serie de violaciones al derecho internacional“, señaló la Cancillería ecuatoriana en un comunicado.
Más temprano, la misma titular del Ministerio de Relaciones Exteriores de Ecuador, Gabriela Sommerfeld, había calificado como “justa” la resolución de la OEA, que condenó “enérgicamente” la incursión de la Policía ecuatoriana en la embajada mexicana en Quito, el viernes pasado, para capturar a Glas.
En la resolución de la OEA se reafirmó “la obligación” que tienen los Estados “de velar por el respeto de los privilegios e inmunidades de las misiones diplomáticas y del principio de inviolabilidad“.
Asimismo, la OEA exhortó a Ecuador y a México a que “inicien un diálogo y tomen acciones inmediatas para resolver este grave asunto de manera constructiva”.
Ecuador y México atraviesan desde la semana pasada una crisis diplomática originada por la concesión del asilo a Glas y la posterior irrupción en la sede diplomática.
El exvicepresidente se encontraba en la Embajada de México desde el 17 de diciembre de 2023 y fue detenido cuando ya había recibido el asilo solicitado al declararse un perseguido político y víctima de lawfare (utilización del aparato judicial contra adversarios políticos), algo que el Gobierno rechaza enfáticamente al respaldarse en la independencia judicial.
El ex segundo mandatario, que ocupó el cargo durante el mandato presidencial de Correa y a inicios de la Administración de Lenín Moreno (2017-2021), se encuentra imputado en el caso Reconstrución de Manabí por el presunto delito de peculado (malversación de fondos públicos).
También debía regresar a prisión para acabar de cumplir una pena de ocho años de cárcel por dos condenas por cohecho y asociación ilícita, la última de ellas en el marco del caso Odebrecht, por las que ya estuvo cerca de cinco años encarcelado entre 2017 y 2022.
Actualmente, Glas se encuentra en La Roca, la cárcel de máxima seguridad de Guayaquil, aunque el lunes fue hospitalizado de emergencia por una descompensación que, según el parte policial, se debió a una sobredosis de medicamentos y que las autoridades penitenciarias achacan a una negativa a ingerir alimentos.