El cable submarino que provee gran parte del internet a Ecuador ha sido objeto de controversias desde su inauguración en 2015. Este sistema, compuesto por 7 000 kilómetros de cobre y fibra óptica, es operado por cinco compañías, incluida Cable Andino S. A. Corpandino, cuyo accionista mayoritario es Telconet, una empresa de la familia Topic.
Esta infraestructura transmite información desde un centro de procesamiento de datos en Estados Unidos y ha enfrentado observaciones por presuntas irregularidades en su concesión.
Un informe de la Contraloría General del Estado (CGE), publicado en 2019, reveló que durante la adjudicación del proyecto no se validó adecuadamente la información proporcionada porCable Andino S. A. Corpandino. Además, se detectó que el 99 % de las acciones de la empresa pertenecen a Telconet, cuyo propietario es Tomislav Topic, padre del excandidato presidencial Jan Topic.
La inauguración del cable submarino, en noviembre de 2014, estuvo encabezada por Topic y el entonces vicepresidente Jorge Glas, un evento que marcó el inicio de un servicio estratégico para el país.
El informe de la CGE también evidenció problemas en las declaraciones de ganancias de Cable Andino. Según el documento, la empresa no reportó utilidades ni pagó al Estado el 0,5 % correspondiente en regalías. Esto, pese a que se estimó que la totalidad de la capacidad del cable submarino estaba vendida, generando ingresos por 201 millones de dólares anuales.
Entre 2015 y 2018, se calculó que el Estado debió haber recibido al menos cuatro millones de dólares por este concepto, lo que nunca ocurrió.
Telconet no es ajena a las polémicas legales y políticas. Durante las investigaciones del caso Sobornos 2012-2016, la Fiscalía reveló que la empresa china Glory depositó 13,5 millones de dólares en una cuenta de la familia Topic para el desarrollo del cable submarino. Según las autoridades, este dinero estaba relacionado con los sobornos de la constructora brasileña Odebrecht. Aunque Tomislav Topic devolvió esta suma al Estado ecuatoriano, posteriormente, mediante un fallo judicial, la recuperó, generando un nuevo debate público.
La historia del cable submarino evidencia una mezcla de beneficios tecnológicos y cuestionamientos legales. Mientras esta infraestructura sigue siendo clave para el acceso a internet en Ecuador, las irregularidades detectadas por los organismos de control y los vínculos con escándalos de corrupción continúan levantando críticas sobre su operación y gestión.
