Paulo Uruchima ha escrito su nombre en los libros de historia del fútbol ecuatoriano al convertirse en el jugador más joven en debutar en la primera división del país. El joven volante de 15 años, 7 meses y 4 días, rompió el récord que anteriormente ostentaba el jugador de Independiente del Valle, Kendry Páez.
El hecho histórico de Uruchima se produjo en el partido en el que Deportivo Cuenca enfrentó a Barcelona, en la séptima fecha del torneo local.
A pesar de la derrota por 4-0, el debut del talentoso futbolista ecuatoriano dejó su marca en la historia del club, ingresando al terreno de juego en el minuto 88, reemplazando al referente del cuadro morlaco Lucas Mancinelli.
Su ascenso a la primera división es el resultado de un arduo trabajo en las divisiones formativas del Deportivo Cuenca, donde mostró muy buenas cualidades técnicas y físicas.
El técnico argentino Luis García, quien recientemente abandonó al equipo azuayo, dirigió el partido en el que Uruchima hizo su debut, fue el responsable de incluir al joven talento en la plantilla principal para la presente temporada.
