Por ahora, los problemas que orillaron a cerrar las compuertas de la central hidroeléctrica Coca Codo Sinclair, el viernes 21 de junio, se resolvieron, según informó el Ministerio de Energía a Televistazo.
La cartera de Estado detalló que la hidroeléctrica está operativa con siete unidades de generación, y que la octava está en mantenimiento planificado, por lo que hay un aporte energético de 1 160 megavatios (MW), cumpliendo así el despacho energético solicitado por la Operadora Nacional de Electricidad (Cenace).
La capacidad de esta hidroeléctrica que produce el 25 % de la eletricidad del país es de 1 500 MW de potencia. El viernes, la operacion de esta central, que es la mayor hidroeléctrica del país, se detuvo por el volumen de sedimentos que arrastró el río Coca por las fuertes lluvias.
Esta situación ocurre cada vez con más frecuencia, ya que esta megaobra no cuenta con un sistema de compuertas de fondo para limpiar los sedimentos más pesados.
Por otra parte, según la información de la Corporación Eléctrica del Ecuador (Celec), Mazar, la más grande del complejo Paute, hoy llegó a 2 152 metros y está a uno de alcanzar el máximo: 2 153 metros sobre el nivel del mar.
También, la cota de la represa Amaluza, que alimenta la central Molino, hoy llegó a los 1 990 metros sobre el nivel del mar y está a un metro de llegar a su nivel máximo. Sopladora marcó 1 316 metros sobre el nivel del mar, siendo su máximo 1 318 metros.
Mientras tanto, informaron que la central Termoeléctrica Esmeraldas, que proporciona 125 MW, volvió a su operacion comercial.
Por ahora, los riesgos de cortes no son por falta de generación, sino por presencia de sedimentos, como ocurrió en la central Coca Codo.